El tren de mis momentos

Ya hace mucho tiempo guarde un escrito que se llamo el tren de los momentos, el escrito no es mío solo me intereso lo que contenía, estuve indagando sobre su actor pero no lo logro encontrar espero que si algún día por casualidad del destino se encuentra con mi blog darle gracias porque su escrito me ayudo mucho .. espero les guste y les ayude como ami...

Tengo una vida, que se parece a un bus. Que anda de estación en estación siguiendo un camino que alguien le dió. Que tiene como pasajera a la melancolía y al rencor. Que pasa por las calles sin mirar a los demás y recogiendo pasajeros y dejando otros más. El amor nunca se subió a este bus y Soledad sigue esperandola para que le haga compañia, le ha guardado un sitio en la parte de atras, donde podran hablar y se podran mezclar. Tengo como pasajero a un niño que vive asustado de la vida y que no se quiere bajar por el mundo exterior. Tengo de pasajero al miedo que anda ahuyentando a ciertos pasajeros y que huye de si mismo porque incluso el se tiene miedo. Tengo de pasajero a la autoestima que se baja y sube cuando quiere y no espera una estación para hacerlo, muchas veces se tira por la ventana. Tengo a soledad y a su hermana. Tengo a un Dios empujando mi vehiculo. Llevo en mi bus a mis hermanos, a mi madre, a mi tio. Llevo heridas en la bodega. Llevo varios puntos de alcohol en la sangre. Sangre de gasolina y lastimas en el motor. Nunca miro el retrovisor porq este no me muestra más que caminos malos en los que alguna vez estuve y a los que no quiero regresar. Tengo penas de maletas y pasajeros que siempre se quejan, el miedo que no tengo sentimientos, soledad que espera al amor, la melancolia que se quiere bajar y otros que siempre reclaman a la autoestima. Tengo una ruta y el medio pasaje no se aplica aqui. No necesito cobradores porque todos me pagan a mi, bien o mal pero pagan al fin. Tengo amigos como llantas y muelles, que me sostienen cuando el camino es malo. Tengo de pasajera a mi alma que nunca se ha bajado de mi bus y sigue sentada en el mismo asiento, esperando y esperando y ya no sé si botarla, venderla o enamorame de ella. Tengo ventanas que no muestran mucho de lo que hay adentro y que hacen que parezca un bus malo. Tengo a Jesus de copiloto. La sarita ilumina mi camino. Y esperemos que nunca reaparezca el sendero luminoso. Tengo un bus lujoso pero solo por dentro. Un bus dulce por naturaleza pero que no se muestra a los demás. Un bus que contiene muchas palabras pero usa pocas. Tengo un cargamento de talentos en una de las bodegas pero como nunca se me reventó una llanta no los he necesitado para reparar nada. Tengo una vida incompleta por que me sobran asientos en este bus....