No tengo la culpa de un error…. Y es que ya empiezo estar harta de continuar, de ver como esas historias te hacen dudar, no dudes mas, que estando juntos la vida un sueño será, haremos cosas prohibidas que ha gloria sabrán.
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Estaba bajo una fuerte lluvia, era demasiado raro, el clima no estaba de su parte. Su blusa nueva estaba arruinada, el celular se mojo, no llegaría al cumpleaños de su mejor amigo, en fin nada había salido como ella quiso…. Pero lo mas extraño fue ver aquel tipo sentado en una banca dejando que la lluvia lo empapara. A simple vista parecía un chico de su edad quizás dos o tres años más que ella, El voltio a mirar, pues la “inocencia” de ella había hecho que se quedara parada a metros de la banca y lo contemplara, El miro, rió y voltio la mirada hacia el cielo como en algún momento lo había hecho . Se ruborizo hasta sentir que sus mejillas le iban ha explotar, camino molesta y llego a su departamento.
Aun podía verle desde su ventana pensó en no darle mucha importancia ,pero se quedo mirando detrás de la cortina azul de su departamento ,pasaron algunos minutos , el se levanto y se fue – Chico extraño-pensó. Quien en su sano juicio se quedaría en una banca debajo de la lluvia para enfermarse, en algún momento se le cruzo por la mente que estuviese esperando a alguien que nunca llego – loco estas mojado ya no te quiero- pensó, rió se tiro en su cama y se quedo dormida en pocos minutos. ...Tuvo un sueño extraño de esos que no se pueden explicar, porque si lo quieres hacer se van borrando del a memoria, y ella aun quería conservarlo. Últimamente llegaba tarde a su departamento, por temas de estudios y demás cosas “sociales”. Una de esas noches volvió ha encontrar a aquel chico, era como si estuviera esperando algo, nuevamente subió a su departamento, quiso ver por la ventana pero ya no estaba. Y así pasaban días en que lo encontraba sentado en la misma banca, y eras mas mismas veces las que le provocaban preguntarle que buscaba, que esperaba o simplemente su nombre, pero hasta entonces no lo hizo. Una noche trato de llegar mas temprano que de costumbre, para encontrarlo pero no lo vio , quizás era demasiado temprano- pensó – solo que ese día no apareció, lo mismo que la semana siguiente.
Lo extrañaba si era esa clase de ensoñación que se fija sobre aquello que nunca mas ha de volver, esa fatiga que se apodera de nosotros después de cada acontecimiento consumado, ese dolor en fin, que nos trae la interrupción de movimientos que solíamos hacer, la desaparición súbita de una vibración prolongada…Volvieron los días lluviosos y de la misma manera en que por primera vez lo vio lo encontró ahora.
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Si pruebas una vez te puedo enamorar
